Hace cinco meses llegó a mi buzón electrónico un correo en el que se me convocaba al pase de prensa de 'Cleaner', un thriller de Samuel L. Jackson en el que interpretaba a un limpiador de escenas del crimen. Samuel L(impiamoquetas-y-tresillos) Jackson. Y vas y vas. Y te tragas la intriga de siempre contada a la manera de siempre. La película en cuestión, presentada en San Sebastián 2007 con el actor 'in corpore', cuya llegada a los cines estaba prevista para el primero de agosto, nunca llegó a estrenarse en España.
Un colega le preguntó en Donosti si no se estaba encasillando y el bueno de Samuel casi se come al periodista. Literalmente. Suerte que la improvisada barrera de sillas que interpuso previamente entre él y la muchedumbre le impidió su maniobra homicida. Son los problemas que tiene ser una 'prima donna', que a veces, por un exceso de celo, no puedes matar a quien quieres.
Samuel L(iquidador) Jackson, con su peluca de Jules Winnfield se ganó un puesto, en formato póster, en las paredes de todos los dormitorios frikis del mundo a mediados de los 90. Hablo de 'Pulp Fiction', por si alguien de ustedes estuvo criogenizado en aquella época. Jules cagándose en todo, increpando a Travolta. Jules queja que te queja: "Jamás te voy a perdonar por toda esta mierda. Esto es de lo más repugnante. El hijo de puta que dijo que había que perdonar a quienes se arrepienten nunca tuvo que recoger trozos de cerebro con los dedos por culpa de tu estúpido culo". Si es que alguien dice "culo" y nos partimos.
Samuel L(etal) Jackson: "El camino del justo se ve asediado por todas partes por las iniquidades del egoísmo y la tiranía de los hombres malos. Bendito sea aquel que, en nombre de la caridad y de la buena voluntad, pastorea a los débiles a través del valle de la oscuridad, pues él es el verdadero protector de su hermano, el que encuentra a los niños perdidos. Y yo actuaré con terribles venganzas y furiosos escarmientos contra aquellos que intenten envenenar y destruir a mis hermanos. Y sabréis que yo soy Yahvé cuando os aplique mi venganza". Buena, aunque algo larga, frase para ligar. La mayoría de las veces, las chicas de mi barrio no me dejaban llegar al momento en que me tocaba pronunciar la última palabra acompañándola de disparos de mentira. Qué sosas, ellas eran más de 'Forrest Gump'.
Y después... nada. ¿Cómo? Nada: sobrevaloración pura y dura. Sobrevino el apagón a pesar de que su nominación al Óscar al Mejor Secundario (le ganó Martin Landau por su interpretación en 'Ed Wood', Samuel L(ívido) Jackson) le había situado en un puesto de privilegio en Hollywood. A priori no eligió mal sus siguientes proyectos: 'La jungla 3', 'Tiempo de matar', 'Jackie Brown', 'Esfera', 'La amenaza fantasma', 'Un domingo cualquiera'… (McTiernan, Schumacher, de nuevo Tarantino, Levinson, Lucas, Stone...) y, sin embargo, a excepción de sus correrías con Bruce Willis para impedir que Nueva York saltara por los aires, su imán había desaparecido de la noche a la mañana. Teníamos en casi todo lo que se estrenaba a un fornido hombretón negro de indudable presencia pero cada vez menos carisma.
Esta escena de 'Pulp fiction' le valió su única nominación al Óscar
No servía para llevar el peso protagonista. Se demostró con 'Shaft'. Además, los truquitos para cambiar nuestros esquemas mentales y hacernos pensar que no notaríamos la diferencia cuando nos dieran gato por liebre (es el nuevo Nick Furia de Marvel y fue el lugartenienente Dan 'Hondo' Harrelson en 'S.W.A.T.' —tomando el relevo de Steve Forrest, quizá el hombre más blanco de América—) parecían más destinados a hacernos sentir culpables si lo denunciábamos que a un intento de reinvención de los iconos.
La circunstancia de 'Cleaner' se repitió poco tiempo más tarde cuando me enteré de que 'El último asalto', coprotagonizada por el cachas de cara rara Josh Hartnett, que vi en un avión, se estrenaba aquí directamente en DVD. Argumento deportivo + periodista fornido, idealista y listo como un rayo + Samuel L(ánguido) Jackson haciendo de ídolo caído = 3 millones de dólares en 1.600 salas. Yo no reprocho a los distribuidores españoles que no la quisieran traer.
Habrá quienes piensen que mi enconado discurso es vacuo, que es un tipo taquillero a lo que respondo: "Sí, sin duda lo es", pero en los 14 años que le separan del bombazo de Tarantino no ha conseguido conciliar a taquilla, crítica y público (característica de las grandes estrellas). Sus mejores trabajos han sido en papelitos underground y sus grandes éxitos casi siempre atendían a factores exógenos.
Estas son sus películas post-94 que han rebasado los 100 millones de dólares en taquilla americana:
- 'Jungla de cristal: La venganza' (1995). Un papel casi calcado al de su consagración que sin embargo necesitó de Bruce Willis para rebasar la cifra mágica por los pelos.
- 'Tiempo de matar' (1995). Qué guapos estaban Sandra Bullock y Matthew McConaughey, uno de los ex de Pe.
- La nueva trilogía de 'La guerra de las galaxias' (1999), (2002) y (2005). ¿Hay alguien que no sea un 'warsi' que recuerde si estaba a favor o en contra del Imperio?
- 'xXx' (2002). Vin Diesel se convirtió en estrella.
- 'S.W.A.T.' (2003) Se apoyaba en Colin Farrell y en la marca del producto, aunque sí es cierto que cargó con gran peso.
- 'Los increíbles' (2004). Sólo ponía la voz. Además era de Pixar. Si yo hubiera salido en su lugar, habría recaudado más porque, además de todas las entradas que vendió, mi madre también se habría acercado a verla.
Pensarán que le tengo inquina al actor, pero ahora es cuando el artículo da un giro de 180º y el poli malo se convierte en poli bueno. Algo así como Snape, que le repartía hostias a Harry Potter para provocarle una catarsis. Si no hubiera creado en ustedes cierta animadversión hasta ahora hacia el actor que protagoniza esta pieza no entenderían mi alabanza del último párrafo, que es el que va después de este punto y aparte.
Hace dos semanas llegó a mi buzón electrónico un correo en el que se me convocaba al pase de prensa de 'Protegidos por su enemigo', un thriller de Samuel L. Jackson en el que interpreta a un 'madero' de Los Angeles cargado de prejuicios raciales. Los casi desconocidos Patrick Wilson (no tienen por qué saber ni cómo se escribe su nombre hasta que estrene 'Watchmen') y Kerry Washington son sus compañeros de reparto, con lo que el número uno de taquilla que consiguió en USA el pasado septiembre se debió casi por completo al cabrón redomado que interpreta. Dinero, crítica y público 14 años después. Nosotros podremos disfrutar a partir de este viernes a Samuel L(o volvió a lograr) Jackson.
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