La refundación de la saga de 'El castigador' recuerda mucho al discurso del personaje que interpretaba John Cusack en 'Alta fidelidad' cuando se refería a su primera novia: "A veces me aburría tanto intentando tocarle los pechos que probaba entre las piernas. Era como pedir un dólar y cuando no te lo dan, pedir 50.000". Como los responsables de la primera tentativa (con Thomas Jane y John Travolta a la cabeza) no quedaron a gusto con la taquilla, para este reseteo demoledor han preferido al desconocido Ray Stevenson, una suerte de justiciero clónico de Mario Conde cuyo mérito más destacable había sido una aparición en 'El rey Arturo' y un papel fijo en la serie 'Roma'.
El malo que sustituye a Travolta es Dominic West ('300', 'The wire'). El desconocido Jonathan Hensleigh a los mandos ha sido relevado por la desconocida Lexi Alexander, que ha contado con una tercera parte menos de presupuesto. Si querían más taquilla, salieron escaldados en USA. Si querían más calidad, les ha salido un producto similar. Si lo que querían era un festival gore sin gota de autoparodia alejado totalmente del tono Marvel y algo más cercano al goteo de una tubería rota del Bronx, el resultado ha sido impecable. No se puede negar, aún así, el cierto encanto que emana la asepsia moral de este nuevo Frank Castle, ni su contundencia arrasadora (ojo al puñetazo que le mete a uno de los gángsteres con el que hunde su mano hasta el occipucio del rival).
Valoración: 5/10
1 comentario:
Yo también la vi hace poco en vistas de que no se va a estrenar y la verdad es que me pareció la mejor versión del castigador en el cine.
Saludos
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