El objetivo: encontrar la nueva C.S.I. Con ello sueñan los jefes de contratación de producto extranjero de las cinco cadenas generalistas españolas. Su cometido es peinar la producción estadounidense, en constante renovación, hacer una oferta y esperar que la competencia no se adelante. Los espectadores sólo presionamos el botón del mando, pero, hasta sintonizar la serie de moda, hay un largo proceso detrás.
La audiencia cosechada en EE.UU. es un factor a tener en cuenta, pero no siempre. Productos como Dos hombres y medio, Navy o Perdidos, auténticos bombazos allí pueden pasar desapercibidos si no se programan de la manera oportuna. Las razones nos las explica Álex Flórez, responsable del área en Cuatro: “Lo que nos diferencia de EE.UU. son principalmente dos factores: su largo bagaje a la hora de consumir sitcoms, género que en España casi nunca ha cuajado; y segundo, existe un tipo de series muy “americanas”, tipo NCIS: Navy o JAG: Alerta Roja, que allí rompen los audímetros y aquí apenas tienen repercusión”.
Si atendemos a eso, las telecomedias son veneno y cualquier cosa que haga demasiada referencia a la intracultura americana, no demasiado apetecible. Donde esté la tapita de jamón de Los Serrano o las bodegas de Gran Reserva, que se quite el foie de Gossip Girl. “Sirva como ejemplo el caso de Física o Química, una serie nacional de gran éxito en nuestra cadena”, explica el subdirector de Programación de Antena 3, Javier Iriarte. “Si compráramos un producto americano de temática parecida y lo programáramos en prime time, no funcionaría”, afirma.
Ahora fijémonos en el formato. Atendiendo al pedestal que ocupan aquí Los Simpsons (Antena 3), C.S.I. (Telecinco), House (Cuatro) y Bones (La Sexta), comprobamos que su común denominador es la autoconclusividad. Por ello es que House se impone a Anatomía de Grey y que Perdidos fue perdiendo fuelle poco a poco. En ese sentido La Sexta está empezando a tomar buena nota con sus últimas apuestas. “Tanto las historias de Bones como de El Mentalista o Navy: NCIS empiezan y acaban en el mismo capítulo facilitando el afianzamiento de un público que se enfrenta a una oferta de ficción tan variada”, cuenta orgulloso Sergio Ramos con respecto a los éxitos de su cadena.
Y en cuanto a temática, ¿qué es lo que quieren los españoles? ¿Por qué somos tan aficionados a los hospitales si tanto yuyu dan en la vida real?, ¿por qué los crímenes y sus resoluciones gustan tanto si nos aterraría protagonizar uno? Ramos cree tener la respuesta: “Pienso que otro de los aciertos de nuestros programas es que siguen la línea de la clásica serie procedimental con mucha acción y personajes admirables”. Premisas todas cumplidas a rajatabla por House, cuya mayor baza según Álex Florez, es “su destacable la capacidad heroica, que produce fascinación en el espectador”.
Después de analizar el panorama, vemos que hemos definido casi punto por punto a C.S.I., la niña bonita. El círculo se cierra. Patricia Marco, directora de la división de Televisión y TDT de Telecinco, apunta las razones de su éxito: “Ha sido rompedora en planteamiento, forma y desarrollo. Posee unos personajes bien perfilados, una temática novedosa, una narrativa sorprendente y un look diferente que resultan claves”. Ojeadores, ya saben. Consigan la perfección del equilibrio y tendrán un éxito asegurado. Como si fuera tan fácil…
Supertele nº955 (3-9 julio 2010), pág. 22
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