1 dic 2009

Vale menos que el precio de la entrada

'Paranormal Activity' (Oren Peli, 2007)

Lo que es paranormal es que estas cosas despierten el boca a boca.

Y que conste que pongo "boca a boca" porque lo he leído en algún foro erudito, no porque crea que tiene mínimo sentido. En realidad debería ser "boca-oído" (lo que pasa es que muchos foreros Churchills se me han quejado en ocasiones), que es cuando se produce un ciclo de comunicación completo, porque si sólo hay movimiento boca a boca, todos hablan y nadie escucha, y es entonces cuando se produce el sindiós, el caos y la anarquía, la gente arranca y quema las butacas del cine, o, lo que es peor, pega chicles asquerosos debajo del apoyabrazos que siempre toco. Qué puta pena.

Heredera de 'El proyecto de la bruja de Blair' en cuanto a humildad de medios, concepción formal y pretensión de afección mediática viral, 'Paranormal Activity' ha sido pionera en el sistema 'Platform on Demand', según el cual, la película se estrenaría al principio con muy pocas copias, cantidad que se iría incrementando de manera exponencial a medida que los habitantes de determinadas zonas fueran requiriendo su proyección a base de peticiones en red. Las entradas vendidas antes siquiera de que llegara la cinta.

Y puede que ahí acabe su lista de méritos, en el hecho de haber conseguido atraer una atención brutal con realmente poco detrás. Cierto que no es el terror acostumbrado que venimos consumiendo en formato saga. Todos los 'Destinos finales', 'Screams', 'San Valentines sangrientos' (comedias disfrazadas) o 'Saws' (porno camuflado de gore —jaja—) tienen un esquema similar. La expectativa (poca) y el resultado (poco), suelen corresponderse en esos casos.

Aquí, como sucedía en la mencionada 'Bruja...', en '[rec]' (1 y 2) o en 'Monstruoso', se juega con la baza del desmadre, del todo puede pasar, y se construye sobre la marcha con cámara de director-protagonista al hombro. Lo malo de huir de la regla básica del cine (un narrador omnisciente fija su punto de vista donde más interesa) es que, a no ser que entres de manera incondicional en la historia, te enfadas y mucho al pensar en por qué el sujeto sufriente está más pendiente de grabar todo que de salvar el culo.

Oren Peli, que, a la vista de sus más de 100 millones de dólares en la taquilla doméstica con una inversión menor a lo que suele costar una cámara en condiciones, ya tiene nuevo proyecto en cartera, peleará a partir de ahora por demostrar que tiene talento más allá de este casual flautazo que ha pegado. Y es ahora cuando nos preguntamos dónde estarán aquellos genios de Daniel Myrick y Eduardo Sánchez.

Alucino absolutamente con las entusiastas críticas de los medios más pintones, que celebran el sobresalto de una película en la que una pareja de tarados mentales pone cara de miedo y peligro sin moverse de su casa encantada porque creen que una cosa les está acechando. En vez de salir a la calle a decirle al vecino: "Mira Juanma, se me mueven los floreros, puedes entrar a echarme una mano y le damos una tunda a la criatura", se resguardan entre mantas esperando a que les coman, pero eso sí, regustrando todo en una cinta para que las generaciones venideras puedan disfrutar del testimonio grabado y se cuiden mucho de tocar las pelotas a los espectros.

(SPOILERS)

Peli, astuto vendemotos y futuro Alfred Hitchcock, avisa en los créditos iniciales de que la proyeccción de su timo vestido de película de culto se ha exhibido gracias a la generosidad de los familiares y al permiso de la policía local del pueblo en que la pareja de acojonadizos protagonistas residía. Ése (el segundo 7 de proyección) es el momento en el que desconecto porque:

a) Me toman por gilipollas. Si fuera cierto lo que se cuenta, lo habría leído en los periódicos.
b) Si la familia tiene que tomar parte en la decisión es porque los protas mueren. Me la han destripado como 'Moulin Rouge'.
c) Ninguna familia es tan jincha como para comerciar con los despedazamientos de sus familiares.



Valoración: 2/10

Estreno: 27 de noviembre de 2009

1 comentario:

misternny dijo...

Es una grandísima película.

Y como dice la publicidad, yo no pude dormir bien la noche después de verla.

saludos.